Soportes de comunicación que comunican
En la búsqueda de la coherencia entre el mensaje y el material
¿Alguna vez os salió una sonrisa al tocar una tarjeta de visita que os entregan?
¿Alguna vez os han preguntado expresamente de qué estaban hechas vuestras bolsas?
¿Alguna vez os han devuelto un sobre porque parece bueno y ya tiene muchos tuyos?
¿Alguna vez en un evento te has llevado el catálogo porque te gustó su tacto y aspecto?
Estas situaciones las he vivido en persona o a través de clientes con algunas de las aplicaciones diseñadas. Lo que ha provocado estas reacciones ha sido la correcta elección del soporte, del material de reproducción.
La elección del soporte influye en la percepción del mensaje, puede ir en coherencia con él e incluso reforzarlo o dar una imagen contraria o negativa por no ser el adecuado.
La búsqueda de materiales es una fase igual de importante que el propio diseño, forma parte de él. El material idóneo puede llegar a ser el mismo mensaje.
Un buen material de reproducción equivale al mejor tejido para confeccionar un traje, esto no quiere decir que sea un material lujoso o muy caro porque no se trata del lujo o extrema calidad sino de coherencia entre la marca, el mensaje y el soporte donde se plasma. A día de hoy hay papeles fabricados con pasta 100% reciclada, cuyos certificados permiten incluir la leyenda de los organismos correspondientes que certifican ese papel. La empresa que emplea este tipo de papeles está hablando de sí misma comunicando su compromiso con el ambiente.
La función es otro punto fundamental para la elección del soporte.
¿Para qué se va a usar, dónde y qué vida útil va a tener? Más allá del papel una empresa precisa otros soportes físicos como señalética, muebles, ropa, comunicación exterior… Las alternativas son muchas, algunas de ellas llevan mucho tiempo en el mercado pero siguen resultando novedosas por desconocidas para las empresas:
- Madera de balsa para muebles, comunicación interior o señalética por ejemplo. Un material hecho de láminas de madera encoladas entre sí. Es un material muy resistente y ligero a la vez que permite ser impreso directamente. Para cartelería interior fija, señalética o fabricación de muebles y encimeras en una excelente alternativa.
- Vinilos electrostácios que no emplean adhesivos para su colocación. Permite reposicionar cuantas veces se desee sin dejar rastro y sin conocimientos técnicos, ideal para campañas cortas.
- Papel piedra sin celulosa fabricado con carbonato cálcico y resinas que hacen de ligante. El resultado es un soporte impermeable, resistente, antigrasa y que no genera hongos. Ideal para imprimir cartas de restaurantes o fichas técnicas de producto que se use en entornos sucios. No precisa ningún tipo de plastificado o barniz para su protección.
- Papel magnético imprimible en cualquier equipo digital. Su grosor y textura permite troquelarlo fácilmente para crear comunicaciones de campañas de corta duración. Se emplea a menudo para publicidad en vehículos.
- Papel madera también imprimible en equipos digitales. Se trata de una finísima capa de madera que puede estar contracolado con un papel o no. Este es una buena solución para piezas per se como tarjetas de visita, cubiertas de libretas, tarjetones… donde el diseño si no es extraordinario no debe restar protagonismo al material. También lo hay adhesivo para etiquetas, un soporte ideal para botellas de visita.
Hay multitud de soportes y materiales adaptados a cada necesidad. Su correcta elección: soluciona cuestiones técnicas como puede ser el vinilo electrostático para campañas repetidas a lo largo del año forma parte del mensaje, incluso puede llegar a serlo él solo despertando sensaciones a través del tacto y la vista e incluso el oído.
Una recomendación final es, abre la mente porque hay opciones que no conoces y déjate asesorar para ampliar tus vías de comunicación.
Imagen de cabecera suelo de piedra del patio del museo del Romanticismo, Madrid