Cómo definir la identidad corporativa de una empresa
La identidad corporativa es un concepto poderoso. Abarca todas las creencias internas y detalles externos que diferencian a tu empresa de las demás en el mercado. Es la base principal detrás de todas las decisiones importantes de una compañía, el principio rector que impulsa a los empleados y, a su vez, a la empresa, hacia adelante. Quedando clara su importancia, ¿cómo se define y crea la identidad corporativa de una empresa?
No importa si eres una pequeña empresa local o el dueño de un negocio con ventas a nivel nacional e incluso internacional. El hecho es que tener una buena identidad corporativa es esencial para cualquier negocio porque ayuda a que este se destaque. Para decirlo de otra manera, puedes pensar que el mundo corporativo se parece mucho al del espectáculo, ya que tu éxito depende de cuánto destaques.
Si puedes lograr que más personas reconozcan y recuerden tu marca, es más probable que vuelvan a ti, lo que significa mayores ganancias para tu empresa. Como especialistas en la creación y definición de identidades corporativas, en este artículo te contaremos cómo se desarrolla una identidad corporativa fuerte.
Cómo definir y crear una identidad corporativa
Antes de hacer cualquier cosa, primero hay que dedicar tiempo a conocer realmente el negocio. ¿Qué hace la empresa? ¿Qué productos o servicios quiere vender? ¿A quién? ¿Funciona bien actualmente en comparación con la competencia? ¿Vende bien a nivel local o vende más a clientes lejanos? ¿Tiene planes de expandirse a nuevos territorios? Estas son solo algunas de las preguntas que se necesitan para poder definir adecuadamente una empresa.
Establecer la propuesta de valor de la empresa
Una identidad corporativa fuerte es aquella que está firmemente arraigada en lo que la compañía cree. Hay que identificar las creencias, valores centrales y filosofías de la compañía y usar esa información para establecer una propuesta de valor sólida. Esta es una declaración concisa que muestra a los clientes objetivo lo que la compañía tiene para ofrecer y que ninguna otra tiene.
Desarrollar la identidad de marca de la empresa
Los términos identidad corporativa e identidad de marca a menudo se confunden entre sí. Esto puede ser así porque los dos conceptos están estrechamente relacionados. La distinción es que la identidad de la marca solo se centra en los elementos visuales de la empresa y, por lo tanto, forma parte de la identidad corporativa.
Las personas son mucho más receptivas a las imágenes y los colores que a las palabras o al texto. Y si bien es importante tener una propuesta de valor sólida, es probable que a tus clientes les resulte difícil recordarla. Aquí es donde entra en juego la identidad de marca, para traducir los valores de la empresa en un medio visual que los clientes puedan comprender y reconocer fácilmente.
Difundir la identidad corporativa
Esto se puede hacer a través de sus típicas campañas de marketing y publicidad. A medida que se desarrolla una estrategia de marketing, hay que investigar para aprender sobre el público objetivo y tener una mejor idea de dónde y cómo llegar a ellos.
Refinar y mejorar tu identidad corporativa
Por supuesto, una identidad corporativa persistente no significa necesariamente que deba permanecer sin cambios. No existe una identidad corporativa perfecta, y es increíblemente difícil, si no imposible, que una empresa lo haga perfecta. Las personas cambian, y con ellas, las tendencias. Incluso las empresas más populares del mundo han cambiado sus identidades corporativas en algún momento.
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