No importa el soporte, importa el mensaje
Si no aportas nada, sobran los soportes
Crear páginas web, abrir redes sociales, contratar espacio publicitario, contratar campañas de adwords, imprimir un catálogo, campaña de buzoneo, marketing directo,… y muchas más opciones de acciones y soportes para llegar a las personas, pero ¿qué les vas a decir? ¿cuál es tu mensaje? ¿qué les vas a ofrecer para que se paren y te escuchen?
Da lo mismo el soporte o medio que se escoja para llegar al público de la empresa si no se tiene un mensaje claro e interesante que transmitir. Ahora habrá quien piense que sin soporte o medio el mensaje no llega, es una gran verdad, pero son «meros» canales de comunicación que si no se cargan con algo que aporte no cumplen su función de canalizar.
En alguna ocasión he vivido el momento de -«Me ofrecen un paquete de anuncios en el periódico a buen precio»- o -«La publicidad en internet es muy barata»-. A esto hay dos preguntas:
- ¿Es el medio para llegar a tu público?
- ¿Qué les vas a contar?
Estrategia
¿Contratarías una empresa de reformas para tu casa sin un mínimo proyecto de obra? Entrarían todos dispuestos en tu casa, con su herramienta en mano y material de construcción pero sin saber si tienen que tirar una pared, reformar el baño, cambiar las ventanas o aislar la vivienda. El soporte sin mensaje es lo mismo.
Todos los colegas de profesión decimos continuamente que sin un objetivo o fin los esfuerzos caen en saco roto. Debe de hacer un objetivo para el que desarrollar una estrategia con un mensaje claro, conciso y corto a ser posible. Sin esa estrategia la inversión está abocada a transformarse en gasto.
Una marca siempre tiene un mensaje que transmitir, o así debería de ser. La comunicación no debe de parar aunque el negocio vaya bien porque es una siembra constante para que la cosecha tampoco pare, por lo tanto si la empresa es consciente de sí misma habrá un mensaje que transmitir, e igual de claro debe de tener cuál es el canal más adecuado para alcanzar a su público.
La promociones de paquetes de anuncios, el crecimiento de la publicidad en internet, la moda de las redes sociales todas y sin criterio, por nombrar algunos canales deben examinarse con lupa. Existen herramientas para averiguar cuáles son los canales más adecuados para alcanzar al público de la empresas y en función del objetivo y tiempos de ejecución hacer una mejor distribución del presupuesto entre los seleccionados.
Dejarse llevar por ofertas de espacio publicitario como si se tratase de una oferta de naranjas en el súper no es buena idea, porque puede que no bebas zumo o todavía te queden en el frutero y terminen pudriendo. En el momento de esa oferta que llegue debe de hacer algo que contar, una estrategia para aprovecharla y transformarla en una inversión.
Igual que la contratación de publicidad sin criterio está el hecho de abrir canales que luego requieren un mantenimiento y que puede que no sean los adecuados para la marca. Esto se refiere a los medios sociales y en concreto a las redes sociales, esos canales pseudo gratuitos con un perfil de público definido para cada uno y unos recursos necesarios para mantenerlos. Antes de abrirlos se debe evaluar esos dos puntos: si son consumidos por quienes me interesan y si se podrá generar el contenido constante que precisan, el mensaje.
En definitiva un mensaje sin canal es un pensamiento y un canal sin mensaje es un despilfarro. Ambos se necesitan mutuamente, pero si el mensaje no es el adecuado, no aporta, no suma, por lo tanto es un esfuerzo desaprovechado.
Para una comunicación eficiente y controlada:
- Establece un objetivo y una estrategia para alcanzarlo.
- Elabora el mensaje adecuado.
- Contrata el canal o soporte acorde al público y mensaje.
Imagen de cabecera puerta de la capilla de San Andrés de Teixido, Cedeira